Entrevistas por Camionetica – Boa Mistura

Desde hace unas semanas el trabajo del quinteto fundado en España, Boa Mistura ha sido mostrado en decenas de diarios de Brasil y blogs de todo el mundo, esto se ha debido especialmente por el último proyecto que han realizado, Luz nas Vielas, que le dio vida a varias paredes en un barrio conocido como Vila Brâsilandia en el noreste de São Paulo.

Así que hablamos con ellos sobre este increíble proyecto, las dificultades para viajar a otro país, la interacción con la favela y todo lo que aprendieron. Aparte de eso. también nos cuentan sobre sus otros proyectos, en donde diseño gráfico, graffiti, pintura y rock convergen para generar una buena mezcla, significado en español de Boa Mistura.

¿Han pensndo en replicar Luz Nas Vielas en otras ciudadades con el mismo tipo de construcción como las favelas en latinoamérica?

El proyecto “LUZ NAS VIELAS” forma parte de un proyecto más amplio que estamos desarrollando llamado “CROSSROADS”, con el que pretendemos mostrar el arte urbano participativo como herramienta de cambio e inspiración en zonas desfavorecidas.

La primera etapa fue en Sudáfrica, ahora ha sido Brasil, y por supuesto que nos encantaría continuar con nuestro cruce de caminos por otras ciudades de Latinoamérica, aunque no sería una réplica de Luz nas Vielas.

El arte en la calle es algo que está anclado a un lugar y a un entorno concreto, y es inamovible. No es como un cuadro, que tú puedes mover de un sitio a otro.

Por esta razón, nos gusta hacer obras específicas para cada lugar, que se integren y que dialoguen con el entorno en el que va a perdurar la obra.

Estudiamos cada lugar minuciosamente, lo respiramos, aprendemos de su gente y nos empapamos de lo que nos rodea para inspirarnos, interviniendo de la manera que hemos percibido mejor para ese entorno concreto.

Por ello sería muy difícil repetir “Luz nas Vielas” en un sitio que no sea Brasilândia

Las favelas brasileñas son de las pocas zonas populares que han recibido los beneficios del arte (recuerdo las fotografías de JR modificando la fachada típica de estas construcciones), pero esto no suele pasar tan a menudo como en las las favelas de otros países. ¿Qué creen que convierta a Brasil en un espacio ideal para experimentar con estas zonas?

No sabemos… lo cierto es que cuando se habla de Favela, directamente se asocia Brasil.

Es lo más inmediato, tal vez debido al turismo masivo que recibe el país.
Las favelas de Río por ejemplo se cuelan en cualquier postal de Copacabana o cualquier fotografía desde el Pao de Açucar. Están siempre presentes, guste o no en el imaginario brasileño.

En nuestro caso, elegir Brasil fue algo circunstancial, creemos que en cualquier rincón del mundo existen áreas degradadas que emanan un potencial y una energía increíble, que a veces solo hace falta para despertarla una chispa tan sencilla como que unos locos armados con pintura se crucen el mundo para trabajar allí.

Siempre desde el extranjero se le tiene cierto miedo a los barrios (favelas), incluso un porcentaje de los habitantes de esas ciudades nunca se acercan a estas zonas. ¿Cómo fue para ustedes vencer este temor, si es que lo hubo, de llegar a un país extranjero y además a estas zonas con tan mala fama?

Para nosotros fue una experiencia absolutamente mágica, que ha cambiado nuestra percepción hacia estas zonas para siempre.

Desde el primer día, sentimos el calor de una familia, la familia Gonçalves, que nos acogió en su casa como si fuéramos sus hijos.

Esto es algo difícil de imaginar en otras zonas menos desfavorecidas.

A partir de ahí, fuimos integrándonos en el barrio de manera gradual, lo vecinos al principio no comprendían como unas personas se habían cruzado el mundo para pintar en su barrio, en su callejón, sin recibir nada a cambio, sin que nadie les contratase para hacerlo.
Pero poco a poco, iban viendo que así era, y comenzaron a surgir los lazos, los vínculos afectivos y la amistad.
Para cuando nos quisimos dar cuenta, los “gringos” que habíamos ido a pintar éramos unos moradores más de Brasilândia, que sentíamos esas calles tan nuestras como si lleváramos allí toda la vida.

Del temor con el que te enfrentas la primera vez a la favela a las lágrimas con las que nos despedimos de nuestra familia y de los vecinos hay un experiencia de por medio que nos dice que, cuando vas a hacer algo de corazón, en el que el dinero no es un intermediario, existe una relación de corazón a corazón, y eso pocas veces resulta peligroso

Del tiempo que pudieron quedarse, luego de hacer cada una de las piezas, ¿lograron ver la repercusión de su obra dentro del vecindario? ¿Cuál es la que más recuerdan?

La repercusión fue inmediata, ya no solo al terminar las obras, sino durante su realización.
Nos acordamos, por ejemplo de Diego, un niño de la viela de la Firmeza que al no haber pinceles y rodillos para todos los que querían pintar, se compró su propia brocha con los pocos Reales que tenía, en lugar de comprar unos caramelos o cualquier otra cosa. Eso ya es un cambio para ese niño. También ver como junto a todos los vecinos de la calle de la Beleza, formados como si fuéramos un ejército, limpiábamos el suelo de un callejón hasta dejarlo impecable para poderlo pintar. Eso ya es un cambio en la mentalidad de esos vecinos, que en lugar de descuidar la calle ahora la barren y la limpian, porque la ven bonita y se sienten orgullosos de vivir en ella.

Otra cosa preciosa fue ver como nuestra intervención sirvió de nexo entre los vecinos. Muchos de ellos hacía años que no se hablaban, y gracias a trabajar mano a mano pintando, a brindar juntos en el churrasco de celebración, se habían reconciliado y estrechado unos lazos perdidos sin razón aparente.

Las experiencias son miles y todas muy intensas, aunque la verdad, nosotros nos llevamos de allí mucho más que lo que dejamos.

Teniendo 5 personas dentro de Boa Mistura, ¿cómo logran para que los estilos de todos converjan en una sola y se creen estas piezas?

Con muchos años de trabajo juntos, y sobre todo, con el respeto mutuo entre nosotros.
Por encima de todo, Boa Mistura somos cinco amigos que se conocieron hace más de diez años pintando graffiti en nuestro barrio, en la periferia de Madrid, y que a día de hoy vivimos haciendo realidad un sueño, vivir de nuestro hobby.

Hemos disuelto nuestros cinco egos individuales bajo uno mucho mas grande llamado Boa Mistura hasta tal punto que somos padres orgullosos de cada una de nuestras obras, da igual si la hemos hecho los cinco, dos o tres de nosotros, siempre es firmada como Boa Mistura.

Desde el 2001, Boa Mistura ha creado proyectos increíbles, Luz nas Vielas en Sao Paulo es solo uno de ellos, ¿qué otros proyectos han marcado a este colectivo?

La verdad que en diez años hay muchos momentos y proyectos que nos han marcado.
Los viajes, las locuras por amor al arte, las noches infinitas, las horas en la carretera, aviones, trenes….

Más que los proyectos en sí, las vivencias que supone humanamente y a nivel personal cada uno de ellos es lo que mas ha ido marcando a Boa Mistura.

Proyectos, hay muchos la verdad…

Die Umarmung

“Die Umarmung”, la fachada de mas de 20 metros que pintamos frente al Muro de Berlín es una obra a la que tenemos un especial cariño.
También “DIAMOND INSIDE”, la primera etapa de este proyecto “CROSSROADS” del que te hablábamos antes fue increíble (estuvimos un mes en Ciudad del Cabo pintando murales y haciendo talleres en zonas marginales).
“POESIA BAJO EL BLANCO” la serie que estamos desarrollando en Madrid de manera ilegal, retratando a otros artistas urbano utilizando solamente blanco…

Estamos en un momento en donde el arte en la calle comienza a respetarse y va dejando el apodo de vandalismo. ¿Cómo ha sido para ustedes manejar esta delgada línea entre lo legal y lo ilegal?

Para nosotros el que un soporte sea legal o ilegal es solo una característica más del mismo.
Cuando intervenimos en la calle, siempre lo hacemos con voluntad de mejorar, nunca buscamos el vandalismo injustificado ni hacer daño a nadie.
Intentamos buscar rincones olvidados, soportes degradados o de poco interés para la ciudad para mejorarlos, para intentar dignificarlos. Lo que hacemos es ilegal porque así lo dice la ley, pero no consideramos que estemos haciendo nada malo.

¿Cómo alguien se convierte en un graffiti rocker?

Jajajjaja! Rockeando duro en cada cosa que se hace, dejándose la piel.

¿Alguna recomendación para el que comienza en esta disciplina?

Que la calle es un megáfono para los que trabajamos en ella, un museo sin intermediarios ni mecenas, por lo que hay que aprovecharla para expresarse.
Y que el único secreto siempre es el trabajo duro, no existen atajos nunca

¿Cuándo tendremos una obra de Boa Mistura por acá en Caracas?

¡Si dependiera de nosotros, mañana mismo tomaríamos un avión para allá!
¡Esperamos que pronto!

¿Algo más que quieran decir?

Mucho amor y mucho rock desde España!

Acerca de Gust

Redactor Creativo. Fundador de Camionetica.com. El único fotógrafo del que nunca hemos visto una foto que haya hecho. Un personaje enigmático, pero que siempre está allí cuando lo necesitas. Algunos dicen que baila el mambo como los dioses. Actualmente trabaja en una agencia creativa. De vez en cuando lo encuentran en @gustmv

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