Desde hace un tiempo he estado tras la pista del trabajo de Paula Duró, una joven artista y VJ nacida en Buenos Aires, Argentina. La obra de esta chica, llena de misticismo, nos introduce en universos de colores vibrantes y paisajes estelares enhebrados con elementos simbólicos de la cosmogonía andina. Cada cuadro pintado en acrílico y óleo sobre tela pareciera emanar sonidos de flautas y maderas sintetizadas.

Lo que más me gusta de su trabajo, es esa manera de mirar hacia adentro y tomar como fuente de inspiración la esencia de nuestro imaginario y de los pueblos originarios de Latinoamérica.

Si quieres ver más arcoiris fluorescentes, chamanes siderales y dragones trasandinos, visita su portafolio en el sitio del colectivo NO DEFINITIVO.