¿Qué pensarías si un día, luego de fumar un cigarro o botar una goma de mascar, terminas encontrando un retrato en una galería con cierto parecido a ti? Pues, esa es la técnica detrás de la exposición Stranger Visions (Visiones Extrañas) de Heather Dewey-Hagborg, una artista norteamericana poco común, ya que en su último trabajo analizó objetos que se conseguía en la vía pública, para hacerles pruebas de ADN y luego generar una impresión 3D de sus antiguos dueños.

Heather siempre ha buscado explorar el arte a través de la investigación. Cuando navegamos a través de sus otros proyectos encontramos un patrón que se repite: la experimentación.

Sentada un día con su psicoanalista, mientras observaba una grieta en un vidrio se enconró con un cabello, allí se preguntó cómo se vería la persona a la que pertenecía esepequeño fragmento y reflexionó sobre el rastro genético que pueden rastrearse, como para hacer una obra en 3D de esa persona y qué facciones podría resaltar a través de su estudio.